Ave María Purisíma ... [Victoria E. Escobedo]

No tenía absolutamente nada que hacer, pensé que sería bueno confesar a las personas que llegaban haya, hoy le tocaba a los jóvenes, a lo mejor podría ayudarlos o aconsejarlos yo también era joven así que nos podríamos entender muy fácilmente. Ademas de que claro estaba que necesitaban no solo mi ayuda si no la de Dios.

Mire a hacia varios lados para que ver si habría algún clérigo, pero no había tal... me metí al confesionario, podría imitar la voz del mas anciano o mejor dicho uno de los maestros de la palabra del señor, ya me estaban hartando ante su forma de ver la religión, a lo mejor me volvería cristiano o protestante.

Ante la maya veía la silueta de una chica, no podría hacerlo pero si ella o alguien me veía me iban a expulsar seguramente, me empezaba a poner nervioso esto no estaba bien ... calma Dorian ... todo saldrá bien, pensé entre mi -Ave María Purisima...- no sabía porque Ave Mará, si al que confiezan los pecados es a Dios... que tonto ... - En ¿qué te puedo ayudar hija? o ¿tienes algún pecado que confesar? - un silencio se hizo ente ambos -Siempre es bueno que alguien te escuche...yo lo puedo hacer-

No era religiosa, pero a veces el hablar con alguien ayudaba mas que hablar contigo misma.

Era de esos dias en los que no tienes ganas de nada, solo quieres tirar la toalla y olvidarte de todo y todos, por que ya no puedes mas, por que parte de ti se esta dando por vencida, pero sin embargo, siempre ahi algo que te dice: Vamos deja de ser una vaga de mierda y levantate. Y entonces te levantas y le sonries al mundo  y tratas de seguir.

No era un buen dia, hoy me habia dado por extrañar mi vida y mi familia mas que ningun otro dia, lo cual me complicaba las cosas, por que la verdad era que yo queria a mi familia, la amaba con todo mi ser, por que por ellos habia llegado aqui. Habia sido un dia muy dificil, antes de entrar al trabajo como todos los dias me di un baño, este baño fue diferente, me deje morir un rato bajo el agua, deje que el agua  se tratara de llevar aparte de mi sudor diario, mi tristeza, pero la verdad es que solo me relajaba un poco no del todo, pero ... ayudaba mucho. Termine la ducha y me dispuse a ponerme unos vaqueros, botas tipo cazador y una blusa de algodon grande blanca con bordados azul de manga larga con un bordado bonito en el cuello redondo, la blusa me quedaba enorme, pero ese era el punto, me cepille el cabello, lo deje acomodarse, tome el bolso negro grande que mas bien parecia bolso deportivo, pero no era deportivo, me meti el movil en la bolsa de los vaqueros y me dirigi a mi trabajo de mesera en alguna cafeteria de este lugar.

El dia paso normal, propinas, sonrisas y muchos tios que me dejaban el numero tras la nota de remision, se iban al bote de la basura, ya por un cabronazo de mierda estaba aqui. Pero el dia ... el dia como tal  habia sido disperso, estaba disperso, pero ... tenia un dia que seguir. El dia paso y yo me lleve un paston de propinas pero queria hacer algo mas antes de ir a casa, que me quedaba bastante lejos de a donde iba, pero podria funcionar.

No se como o por que, pero apesar de que no era muy catolica, queria ir a la iglesia, siempre habia gente ahi interesada en la vida agena, al llegar note que la luz de confesionario estaba prendida, habia alguien eso era obvio, asi que sin penasrmelo me adentre en esa mierdesilla cuyo nombre desconozco, me sente en una silla que estaba ahi y escuche una voz que me respondia, era una voz fingida, solo frunci el seño, y enarque la ceja divertida. No sabia que responder, jamas me habia confesado, pensaba hablar en español, pero ... queria que alguien me oyera

─ El unico pecado que cometi fue ser ingenua -dije bajando la mirada deprimida, y empece en español ─ mi unico pecado fue creer en la gente -senti ... ese nudo en la garganta... ese dolor en el pecho.

Esta chica tenía mucho pesar, me transmitió mucho - ¿amor no correspondido? - fue lo primero que pensé. Pobre niña, su silueta era una niña, hablo en español y me dio a entender mucho, le pregunte -¿gente?, en fin... mi consejo es ... olvida lo que ya paso, las secuelas podrían ser dolorosas, pero sigue adelante, tienes mucho por vivir, te animo a que dejes todo atras y te enfoques en el amor de Dios...tus decisiones son tuyas mas los planes de Dios son maravillosos, aferrate a el y a su palabra divina, verás y te revelará muchas promesas.- Tome mi biblia y se la di por el compartimento color=#ff6600] - toma, te puede servir ... ahi esta, mi movil y mi nombre puedes contactarme para lo que se te ofrezca ... - [/color] tenía algo de cosa que ella no la aceptará. Pero tenía confianza en Dios, el me prepararía para guiar a la luz a esta chica.

¿Mal de amores? puff, eso se curaba con una cucharada de buenos amigos, un par de copas y una buena marcha, pero esto era algo peor, algo mucho peor, esto no se podia curar asi, esto era integridad fisica y emocional, mire un poco extrañada el otro lado, no queria responder, al ojo rapido se notaba que era un crio de mi edad, pero algo raro que no note de inmediato; me entendio en español, estuve a 30 segundos de quitar la cortina que no separab, pero me contuve, no supe como, pero lo hice, frunci el seño y lo deje hablar, de plano era mejor platicar con alguien que contigo mismo, sonrei y arranque la nota con su nombre y numero, este era un chaval de mi edad o mas chico.
Antes de pasarle la biblia no me quise quedar con el entripado del plan de su dios que no me habia dado muchas alegrias hasta ahora

─ Pues que muestre las cartas ya, que yo no le veo lo bonito a esto -suspire y le pase de vuelta la biblia, solo que abierta donde habia dejado la nota, me levante y antes de irme, respire hondo y le abri la puertilla esa que lo encierra, le sonrei y como era de imaginarme era un chaval, un chaval guapisimo, le estire la biblia y dije en mi perfecto Ingles ─ Por chicos como tu, chicas como yo consideramos quedarnos solteras de por vida -le estire la biblia sonriendo- Gracias, solo eh tomado tu numero -¿Era buena idea irme o no? ¿me quedaba? le hacia la platica... me estaba poniendo nerviosa... esto no era normal, no en mi